No es novedad el hecho de que la tecnología ha cambiado la forma en que vivimos, compramos, invertimos y nos relacionamos. La pandemia provocó una revolución digital aún más extraordinaria que la que ya existía, porque obligó a todos a buscar medios para resolver sus necesidades desde su casa.
Con esta transformación acelerada, vale la pena poner atención en las habilidades qué necesitan los jóvenes de hoy para desenvolverse en esta nueva economía, e impulsar las carreras que ayudan a desarrollar estas habilidades.
El boom de las fintech, de las edutech y de toda esta serie de compañías que se mueven a través de la tecnología, ha dejado aún más claro la necesidad de incrementar el número de personas capacitadas en la investigación y desarrollo de innovaciones tecnológicas que puedan ayudar a resolver problemas reales, como desarrollo de software, inteligencia artificial, ciencias de datos, desarrollo de producto.
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¿Por qué impulsar aquellas carreras como las ingenierías en sistemas, en software, industrial, entre otras? Porque son y serán el futuro del mundo, son los que diseñarán esas tecnologías que ya están revolucionando al mundo. Ese tipo de puestos es lo que todas las empresas, desde startups hasta grandes corporaciones, están buscando y no están encontrando tan fácilmente.
Por ejemplo, en octubre del 2021 abrimos 700 puestos de tecnología a nivel global, sin embargo ha sido un desafío encontrar este tipo de talento, pues es escaso y muy demandado actualmente.
Por mencionar tanto solo un caso: requerimos programadores, tanto en frontend como backend. Los frontend son los cracks que desarrollan el look and feel de nuestra app, su estructura, usabilidad, y la fluidez con la que trabaja. Pero estos tienen que hacer mancuerna con los backend, quienes se encargan de que todo lo que suceda en el frontend de una app o página web se procese adecuadamente. Es decir, están tras bambalinas para asegurar una experiencia de usuario transparente y fluida y para ello requiere dominar diferentes lenguajes de programación y bases de datos. Desafortunadamente hay muy pocas personas con este perfil profesional.
Según el Reporte de Mercado Laboral TI 2021, los desarrolladores o programadores, se ubican entre los cargos que más están buscando las empresas en general, no solo las TI, y es que un programador está detrás de todo lo que pasa en los diversos dispositivos móviles que existen, en las apps y páginas web, incluso en temas de seguridad informática. El servicio debe estar disponible siempre.
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La seguridad también es muy importante, por eso también los profesionales de seguridad informática tienen un espacio reservado en las empresas, ya que su labor es elemental no solo para las organizaciones, sino también para los clientes de éstas. Ataques cibernéticos, usurpación de identidad, y clonación de tarjetas, claves o contraseñas, son tan solo algunas de las cosas que están pasando en esta materia.
Definitivamente, puedo seguir listando puestos, ya que además requerimos diseñadores de producto, gerentes de productos y científicos de datos, entre otros. También me queda claro que no somos la única empresa que está en esa búsqueda. Por eso somos muy conscientes de que nos toca capacitar y construir esos talentos.
Los puestos de TI en las empresas cada vez cobran mayor relevancia. De ser un área técnica, casi de apoyo, la tecnología se ha vuelto un componente estratégico fundamental, que no solo aporta información estratégica, sino que genera el insight para entender mejor el mercado y a nuestros clientes, que resulta el punto de partida de nuevos productos y servicios.
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Es fundamental que, como empresarios, apoyemos e impulsemos la correcta capacitación de jóvenes interesados en colaborar en este tipo de trabajos, porque en ellos está cimentado el futuro del país y de todas las empresas que existen en él, así como la seguridad de éstas y la calidad de lo que oferta para sus consumidores. Para ello, debemos tener un diálogo permanente, proactivo y profundo con las instituciones educativas para generar el círculo virtuoso que asegure que tenemos el talento humano necesario.
Asimismo, tenemos que acostumbrarnos al aprendizaje de por vida. Eso significa que las empresas debemos ofrecer esas herramientas de formación pero, a la vez, que cada uno de nosotros asuma su responsabilidad individual de desarrollar las nuevas habilidades duras y suaves que necesitemos. Básicamente, tenemos que inculcar la habilidad de desarrollar habilidades y fomentar el aprendizaje continuo, y así, seguir aportando al desarrollo económico y tecnológico de nuestro país.